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El vídeo de bodas es uno de los recuerdos que con más aprecio se guarda de una boda, seguramente no reciba tantos visionados como las fotos, pero sin duda, es mucho más apreciado puesto que te hará revivir una y otra vez como de una forma directa los mejores momentos vividos en la boda.

Es por ello que es muy importante elegir a un realizador de vídeos de boda que haga un trabajo que os guste, que os cuente qué tiene pensado hacer y que capture todos los momentos mágicos que allí se vivan…

Hoy no pretendemos daros un listado de los mejores o peores artistas audiovisuales de este tipo de eventos, pero sí haceros ver que ese recuerdo puede ser mucho más especial y divertido de lo que estamos acostumbrados a ver, siempre y cuando consigáis que sea original y único… y seguramente incluso a vuestros amigos y familiares les encantará verlo una y otra vez.

Vamos a convertir el momento “vídeo de bodas” en un evento que os reúna a todos delante de la televisión y no sea nada tedioso. 😉

Es por ello que os dejamos algunos ejemplos para que veáis otras posibilidades, y que se las propongáis al realizador para ver si puede llevar a cabo alguna de ellas.

Os dejamos dos ejemplos bastante buenos:

Por una parte, os podéis montar vuestra propia película… ¿qué tal que secuestren a la novia y el ya esposo tenga que ir a rescatarla?

Si lo vuestro no es la actuación, atento a este otro, es precioso y de imágenes espectaculares:

Vosotros debéis decidir en todo momento qué tipo vídeo queréis que sirva para inmortalizar uno de los momentos más especiales de vuestra vida.

"Wedding Photographer" by Chad Podoski

«Wedding Photographer» by Chad Podoski


Cada vez es más habitual que la pareja celebre una despedida de soltero conjunta con los amigos y familiares más cercanos. Ahora es común que las parejas comiencen a vivir juntos antes de casarse, además que comparten amigos. Además, la boda, en ocasiones, no es más que un trámite burocrático, pero esto no tiene por qué suponer un antes y un después en la vida de los novios. En cualquier caso, sean estos los motivos o no, es una opción que viene ganando fuerza en los últimos tiempos.

¿Cómo debe concebirse una despedida de soltero conjunta?

Normalmente se trata de una cena con todas esas personas con las que quieres tener un momento de relax antes de que llegue el gran día. Los amigos suelen preparar sorpresas, vídeos donde ellos sean los protagonistas, y suele haber regalos y alguna aparición estelar… Eso ya depende de los organizadores.
Se suele tratar de un evento más relajado que una despedida tradicional donde los novios van por separado, puesto que el componente sexual suele aparecer en algún momento. Sin embargo, la conjunta, tiene un carácter más amable y un tono más “blanco”… aunque, como siempre, son los amigos y familiares quieren deciden el rumbo que esta llevará.

Después de la cena, la fiesta suele trasladarse a alguna discoteca o lugar donde puedan tomar algunas copas de forma distendida.

Pero, como en todo, hay muchas variantes: desde una sesión en un spa, a una divertida visita a un parque de atracciones, una tarde de paintball pasando, por qué no, por algún concierto o evento que todos disfrutarán y recordarán.

La idea es pasarlo bien, olvidar todo el estrés y empezar con mucha ilusión la cuenta atrás para el gran día del enlace.

¿Y vosotros qué preferís, una despedida conjunta o por separado?

"The High School Sweethearts" by kidoki

«The High School Sweethearts» by kidoki


Hoy queremos hablar de uno de esos temas que más quebraderos de cabeza dan, la organización de invitados en las mesas del convite. Desgraciadamente, aquí no vamos a poder darte las claves para que tu prima Pepi no os dé la noche porque discuta con cualquiera que le pongáis al lado, pero desde luego vamos a intentar que nuestros consejos os sean de una mínima ayuda y podáis completar esta tarea de una forma algo más rápida y con buenos resultados. Allá vamos:

Es muy recomendable que uséis mesas redondas, de entre 8 y 12 invitados, de esta forma, interactuarán de una forma más fácil, las conversaciones podrán ser más plurales y se evitan pequeños grupitos. Todos se ven la cara y facilita la comunicación incluso entre aquellos que no están sentados de forma correlativa. Recuerda que no todas las mesas deben tener el mismo número de comensales.

En la mesa presidencial debes sentar a la gente que quieres tener más cerca ese día, normalmente los padres de cada uno de los contrayentes, los padrinos (si no fueran los padres) con sus respectivas parejas y los hermanos… esto, claro, depende de cada familia. Si tenéis 6 hermanos cada uno, con sus respectivas parejas e hijos (su los hubiera) va a hacer que medio banquete esté sentado en la mesa presidencial. y no se trata de eso. Por otra parte, es posible que los padres estén separados/divorciados y vengan a la boda con sus nuevas familias… Cada caso es distinto, y desde luego no descartes la opción de hacer una mesa presidencial con vuestros mejores amigos y la familia en otra, al fin y al cabo, vas a estar en todo momento pendiente de todos los invitados y apenas vais a estar tranquilamente sentados.

Ubica a las personas mayores juntas, en un lugar más tranquilo, alejados de la zona de mayor bullicio o de aquellas mesas que sepas que van a estar todo el rato haciendo mucho ruido. En algunos casos es preferible que sientes a gente de la misma edad en las mismas mesas aunque a priori no todos se conozcan. Si conoces a tus invitados puedes prever si va a haber feeling entre ciertas personas, en tal caso, y si se te quedan fuera de otras mesas, no dudes en hacer ciertas combinaciones… a veces resulta la magia.

De la misma forma, coloca a tus amigos y familiares más cercanos en las mesas más cercanas a la presidencial, y a los compañeros de trabajo o compromisos varios más alejados, ellos también lo agradecerán.

Pon un cartel a la entrada del salón con los nombres y fotos de los invitados y dónde van sentados, algo divertido para que todos entren con una sonrisa a disfrutar de la comida.

Esperamos que estos consejos os hayan sido útiles.

"The banquet room" by Lyndon Wong

«The banquet room» by Lyndon Wong


La música de las bodas es determinante, los invitados vuelven a casa tarareando las canciones y que se lo pasen mejor o peor a últimas horas de la noche va a depender principalmente de lo que hayan bailado y disfrutado las canciones en la pista de baile. Es por ello que este tema debe tratarse con cuidado y pensar bien qué tipo de música vas a ponerle a tus familiares y amigos el día de tu boda.

Pregunta a tus invitados, gente cuyo criterio musical te inspire confianza, (semanas antes del enlace) qué canciones les gustaría escuchar y bailar. No más de 5 por personas. Así sabréis cuáles son las más solicitadas y cuáles nadie recuerda. Por supuesto, esto no debe ser fundamental, solo es una pista para que os sirva de guía o para que os ayude a descartar temas, pero la última palabra la tenéis vosotros.

Hay gente que abre una lista de música conjunta en Spotify, la reparte entre todos sus contactos de Facebook o Twitter y espera que entre todos le confeccionen la lista ideal que luego pondrán en su boda. Esto al final suele convertirse en una locura, un batiburrillo de canciones sin ton ni son, ahí puede tener cabida todo y posiblemente haya cosas no vayan con el evento, puesto que la gente suele guiarse por sus propios gustos musicales sin tener en cuenta que se trata de una boda donde hay que intentar agradar a todo el mundo y que nadie se sienta fuera de lugar. Por otra parte, este tipo de listas no suele detectar las canciones repetidas, por lo tanto puedes bailar el “Aserejé” 7 veces en la misma noche como no la revises con cuidado antes de darle al “play” en el momento de la fiesta.

Está bien que no te olvides de los clásicos, canciones que todos conozcan, canciones con una coreografía mundialmente conocidas… pero no por ello debes dejar de lado tu toque personal, sorprender a los asistentes con temas que encajen dentro de la fiesta pero que no sean necesariamente gendes hits, pero que para ti y para tu pareja tengan un significado especial. En determinados momentos podéis acercaros al micrófono y comentar qué os inspira esa canción o a quién va dedicada.

Convierte el baile de tu boda en un momento irrepetible, donde todos se rían y sean cómplices de vuestra felicidad.

¿Qué canción no podría faltar en tu boda?

"Dance!" by K. Praslowicz

«Dance!» by K. Praslowicz


Recuerdo la frase “entre gustos y colores no han escrito los autores” cuando me preguntan ¿cuál es el mejor vino o champaña para las bodas? No hay una respuesta definitiva.

Por supuesto, lo ideal es elegir el que más puede gustarle a la mayoría de tus invitados. El precio no es buena referencia, ya que existen vinos y champán de excelente calidad y sabor con un precio muy asequible.

Hay una tendencia que cada día toma más fuerza, reunir a un grupo de amigos y familiares para tener una pequeña degustación de vinos y champán. Será un momento muy agradable ya que podrás compartir con gente especial y tendrás una buena idea de la preferencia de tus invitados.

Además del gusto, sabor y cuerpo de las bebidas, debes tener muy presente el orden que vas a ofrecerlas, así como las copas a utilizar y el tipo de comida a servir.

Existe una regla general para el orden de las bebidas, primero las ligeras y luego las que tienen más cuerpo, igualmente, las bebidas secas antes de las dulces. En teoría, la carne debe estar acompañada con vino tinto, pescados y pollo con vino blanco, aunque, grandes enólogos coinciden que lo mejor para acompañar la comida es tu vino de preferencia y, que según tu paladar, combine mejor con el plato a degustar.

El uso de la copa, es diferente, ya que utilizando la correcta, podrás aprovechar mejor el sabor y olor de la bebida. Las copas de champán y cava deben ser altas y cerradas, para que las burbujas del gas carbónico se concentren verticalmente en forma de columna y las copas para vinos deben ser lisas, transparentes y ligeramente más estrechas en la boca para permitir mover el vino con facilidad.

Una manera de economizar, es hablar con tu proveedor y preguntar si puedes regresar el vino y champán que no se tomen en la fiesta, en caso de negarse, ya tendrás una excusa para seguir celebrando.

"Wedding Photo: Champagne" by Jason Swihart

«Wedding Photo: Champagne» by Jason Swihart

¡¡¡¡Salud!!!!